miércoles, julio 29

ISRH

Tal vez no te bese todo lo que debería besarte. Tal vez tengas razón y esté algo apática (o antipática, por qué no).

Pero te prometo una cosa, amor: cuando logre tragarme este nudo que tengo en la garganta podré estar contigo, abrazarte, sentirte... Me enamoro tanto de ti mirándote, o cuando estás a tu rollo, buscando algo en tu iPhone. Me gusta fijarme en cada golpe de pestañas y en cada gesto, y siento hormiguillas por mi mesenterio...

Pero sólo es un segundo, después vuelvo a mi sedación una vez más. Y vienen los Inhibidores Selectivos de la Recepción de Emociones. Y te amo, ¿sabes? Entonces vuelve el nudo en la garganta, y vuelvo a mirarte, y vuelven las hormigas... y el Inhibidor Selectivo de Recepción de Hormigas.


.

3 comentarios:

Alfonso dijo...

Hace más de un año que una colonia de hormigas se fue a vivir a mi estómago. Y es increible lo que se mueven cuando te miro o te beso.

Te quiero. Y voy a tener paciencia.

Psicodélica dijo...

Los nudos en el estómago están cargados de adrenalina. La segrega el cuerpo no sé muy bien para qué.
Quizá para evitar un dolor todavía más fuerte y molesto.

Alfonso dijo...

.
.
.
.
Te quiero
.
.
.
.